La degeneración macular es una enfermedad ocular que afecta la mácula, la parte central de la retina responsable de la visión nítida y detallada.

Esta condición es una de las principales causas de pérdida de visión en personas mayores de 50 años.

Aunque no hay cura para la degeneración macular, es crucial conocer sus causas, síntomas y opciones de tratamiento para controlarla y mantener la calidad de vida.

En este artículo, exploraremos estos temas y brindaremos información útil para prevenir y enfrentar esta enfermedad ocular.

¿Qué es la degeneración macular?

La degeneración macular se clasifica en dos tipos principales: degeneración macular seca (no exudativa) y degeneración macular húmeda (exudativa).

La forma seca es la más común y ocurre cuando las células de la mácula se desgastan con el tiempo, provocando la acumulación de depósitos amarillentos llamados drusas.

La forma húmeda es menos común pero más grave, y se produce cuando se desarrollan vasos sanguíneos anormales debajo de la mácula, lo que provoca la filtración de líquido y sangre.

Causas y factores de riesgo de la degeneración macular

Aunque no se comprende completamente la causa exacta de la degeneración macular, se cree que está relacionada con factores genéticos y ambientales. Los principales factores de riesgo incluyen:

• Edad avanzada: El riesgo de desarrollar degeneración macular aumenta significativamente a medida que envejecemos.
• Antecedentes familiares: Las personas con antecedentes familiares de degeneración macular tienen un mayor riesgo de desarrollar esta enfermedad.
• Tabaco: Fumar aumenta significativamente el riesgo de degeneración macular y puede acelerar su progresión.
• Obesidad: El exceso de peso se ha relacionado con un mayor riesgo de desarrollar degeneración macular avanzada.
• Dieta poco saludable: Una dieta alta en grasas saturadas y baja en nutrientes antioxidantes puede aumentar el riesgo de degeneración macular.

Síntomas y signos de la degeneración macular

La degeneración macular generalmente se desarrolla lentamente y puede no presentar síntomas en sus etapas iniciales. A medida que avanza la enfermedad, es posible experimentar los siguientes síntomas:

• Dificultad para leer o realizar tareas que requieren visión detallada
• Visión borrosa o distorsionada en el centro del campo visual
• Sensibilidad reducida al contraste y a los cambios en los niveles de luz
• Dificultad para reconocer caras
• Aparición de un área oscura o vacía en el centro del campo visual
• Metamorfopsia: percepción de líneas rectas como onduladas o distorsionadas

Diagnóstico de la degeneración macular

El diagnóstico de la degeneración macular generalmente comienza con un examen ocular completo, que puede incluir pruebas como:

• Examen de agudeza visual: Esta prueba mide qué tan bien puede ver letras u objetos a diferentes distancias.
• Examen de fondo de ojo: El oftalmólogo examina la retina y la mácula utilizando un instrumento llamado oftalmoscopio.
• Tomografía de coherencia óptica (OCT): Esta prueba de imagen no invasiva crea imágenes detalladas de la retina, lo que permite al médico evaluar la presencia de drusas o líquido en la mácula.
• Angiografía fluoresceínica: Este examen implica la inyección de un tinte en el brazo para observar el flujo sanguíneo en la retina y detectar posibles anomalías en los vasos sanguíneos.

Tratamientos disponibles para la degeneración macular

Aunque no existe una cura para la degeneración macular, hay tratamientos disponibles para controlar la enfermedad y retrasar su progresión, especialmente en la forma húmeda:

• Terapia anti-VEGF: Inyecciones de medicamentos que bloquean el factor de crecimiento endotelial vascular (VEGF) pueden ayudar a detener el crecimiento de vasos sanguíneos anormales y filtraciones en la mácula.
• Terapia fotodinámica: Un medicamento fotosensible se inyecta en el brazo y se activa con luz láser en la retina, lo que ayuda a cerrar los vasos sanguíneos anormales.
• Suplementos vitamínicos: Para la degeneración macular seca, algunos estudios han demostrado que ciertos suplementos vitamínicos pueden retrasar la progresión de la enfermedad en personas con etapas avanzadas.

Medidas preventivas para la degeneración macular

Adoptar hábitos saludables y realizar cambios en el estilo de vida puede ayudar a prevenir o retrasar la progresión de la degeneración macular:

• Mantener una dieta equilibrada y rica en antioxidantes, como frutas y verduras de hoja verde
• Evitar el tabaco y limitar el consumo de alcohol
• Realizar actividad física regularmente y mantener un peso saludable
• Proteger los ojos de la exposición prolongada al sol usando gafas de sol con protección UV
• Realizar exámenes oculares periódicos para detectar problemas de visión en etapas tempranas

Conclusión

La degeneración macular es una enfermedad ocular que puede afectar significativamente la calidad de vida de las personas mayores de 50 años.

Conocer sus causas, síntomas y tratamientos disponibles es fundamental para abordar esta condición y mantener una buena visión.

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